Tendencias en la compra de vivienda en Colombia: extranjeros, colombianos en el exterior y compradores interregionales
El mercado inmobiliario colombiano vive una transformación silenciosa pero profunda: cada vez son más los compradores que adquieren vivienda fuera de su región de residencia o incluso desde el exterior. Según el más reciente reporte de Camacol (mayo 2025), hoy casi una de cada cuatro viviendas nuevas vendidas en el país depende de dinámicas externas, ya sea por inversionistas extranjeros, colombianos en el exterior que envían remesas, o familias que deciden comprar en ciudades distintas a donde viven.
Estas tendencias confirman que el mercado inmobiliario colombiano ya no es solo local, sino interconectado y globalizado, con oportunidades que se expanden más allá de las fronteras geográficas tradicionales.
Según el más reciente reporte de Camacol (mayo 2025), el 8,8% de las ventas de vivienda nueva en Colombia se destinan a personas que no viven en el país, un aumento de 1,6 puntos porcentuales frente a 2024. De ese total, el 2,4% corresponde a extranjeros y el 6,4% a colombianos que viven en el exterior y compran con recursos de remesas.
A continuación un gráfico con el porcentaje promedio de ventas a no residentes:
Compradores que cruzan fronteras internas
No solo los residentes en el exterior están moviendo el mercado. Camacol también encontró que el 15,2% de las viviendas nuevas son adquiridas por colombianos que compran en regiones diferentes a su lugar de residencia.
En departamentos como Tolima (56%) y Magdalena (55%), más de la mitad de las viviendas se venden a compradores de otras ciudades. Otros destinos atractivos incluyen Quindío, Bolívar, Meta y Huila.
Bogotá y Cundinamarca concentran el 84,5% de las compras interregionales, principalmente hacia Tolima (39%), Magdalena (21%) y Bolívar (11%).
En el siguiente gráfico, podemos identificar los principales destinos de los compradores interregionales.
¿Qué significa para los inversionistas?
Los resultados son claros: una de cada cuatro viviendas que se venden en Colombia depende de dinámicas externas a la región del proyecto.
Esto confirma que el mercado inmobiliario colombiano ya no es local, sino interconectado y globalizado. Para los inversionistas representa:
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Diversificación: posibilidad de comprar en regiones distintas al lugar de residencia o al país de origen.
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Valorización: acceso a mercados en crecimiento turístico y de segundas residencias (Costa Caribe, Eje Cafetero).
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Oportunidad en remesas: los colombianos en el exterior son un motor cada vez más fuerte de demanda inmobiliaria.
Comprar vivienda en Colombia ya no es solo un acto local: es parte de un mercado en plena internacionalización. Los inversionistas —locales, nacionales o extranjeros— encuentran un país con regiones dinámicas y con oportunidades crecientes más allá de su lugar de residencia.
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